Descarga gratuita del disco de Alea Iacta Est, "confusion"

lunes, 4 de mayo de 2009

situación (pre)revolucionaria


Dice Beck, en su artículo de opinión publicado en El Pais digital, que nos encontramos en una situación prerevolucionaria consecuencia de tres causas: 1, la fractura existente entre producción y ganancia; 2, la aberrante fractura entre legalidad y legitimidad; y 3, las globales ansias de igualdad. Dice que el aumento de las ganancias de la inmesa mayoría de compañías no se ha debido a un aumento de su producción asociado a un incremento de sus ventas y del consumo en general, sino a especulaciones y "dinero prestado"; que todos esos tejes-manejes si bien legales, parecen romper la relación con la legitimidad; y, por último, que el ideario socialista, eso sí, deshidratado, parece haber llegado a todos los rincones del planeta en forma de anhelo o esperanza, por la igualdad entre seres humanos.

Razonamientos todos ellos sesudos y bien hilvanados, pero en esencia, académicos y alejados al día a día de la ciudadanía, pues dada la actual coyuntura económica, pareciera más bien que de llegar una situación prerevolucionaria, ésta estaría más relacinada con el mundano "no tengo trabajo, no lo consigo por ningún lugar, y (en el caso de los estados de bienestar) se ma ha terminado el paro", que con cualquier otra reflexión epistémica. Porque las revueltas del S.XXI no son como las del sigo XIX o XX, especialmente en el mundo occidental, donde a los sujetos lo que les interesa en esencia es que el Estado no se pase con los impuestos, cubra más o menos ciertas necesidades y que las empresas paguen bien y exijan poco. Lo de la solidaridad obrera, la revolución o la igualdad social suena más bien a Cayo congelado Lara que a cualquier otra cosa.


Seamos sensatos: las únicas revuletillas presentes en la España actual sólo han tenido que ver con procesos de deslocalización de empresas... poco con la quiebra entre producción y ganancia, menos entre lagalidad y legitimidad y aún menos (si es posible) con nada que tenga que ver con la igualdad. De hecho, incluso se han "premiado" los tejes-manejes de los magnates de los bancos y los ayuntamientos corruptos en todas las elecciones celebradas hasta la fecha. Ningún mandatario corrupto ha sido castigado en las pasadas elecciones.

Claro que Spain is Diferent, quizás por eso lo de Beck sonara a chino en El Pais. Si lo hubiera publicado Le Monde... ya se sabe que en Francia las cosas van un poco más allá, aunque, a mi entender, queda algo coja su reflexión, pues no comenta nada de la clave de la cuestión, al menos en España: el desequilibrio entre demanda de empleo y oferta, fin de las prestaciones por desempleo a los parados y problemas de integración ciudadana: Inmigración y competencia por recursos públicos escasos.

Si observamos desde estas perspectivas la situación económica-social de la España plural del Siglo XXI nos damos cuenta de que: 1, no es posible producir empleo en el plazo corto; 2, la cartera de parados aumenta y muchos de ellos quedan sin prestación por desempleo en un año; 3, los problemas derivados de una nefasta integración ciudadana entre inmigrantes y nacionales puede ser una bomba relojería cuando el empleo escasea y el cosumo de recursos públicos pasa de la ralla asumible por el Estado. Entonces sí.

No hay comentarios: